Power Point
Caso clínico
Ampliación de información
Vídeos
Los principales problemas de salud
Enero 2011
Enero 2011

Medicinas alternativas y complementarias

Ferran Cordón Granados

Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria EAP Girona 3. CAP Montilivi. Unidad Docente Multiprofesional de Atención Familiar y Comunitaria. Girona Profesor asociado. Departamento de Ciencias Médicas. Facultad de Medicina. Universitat de Girona

Pascual Solanas Saura

Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria ABS Girona-3. Girona

Ferran Cordón Granados

Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria EAP Girona 3. CAP Montilivi. Unidad Docente Multiprofesional de Atención Familiar y Comunitaria. Girona Profesor asociado. Departamento de Ciencias Médicas. Facultad de Medicina. Universitat de Girona

Pascual Solanas Saura

Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria ABS Girona-3. Girona

En la mayoría de los países desarrollados, en los últimos años, se ha producido un incremento muy importante en la popularidad y utilización de las llamadas medicinas alternativas y complementarias (MAC). La prevalencia de utilización de las MAC es muy variada en los diferentes países, y oscila entre un 9 y un 65% de la población1. En España, según algunos estudios, la prevalencia aproximada se sitúa entre el 25 y el 45%, aunque no hay estudios poblacionales amplios2-5.

 

Podríamos decir que MAC es toda aquella técnica terapéutica que intenta mejorar la salud al margen de la medicina convencional6,7. Posiblemente la definición que mejor se ajusta es la que utiliza el Nacional Center for Complementary and Alternative, del Instituto Nacional de la Salud de EE.UU., que la define como un conjunto diverso de sistemas, prácticas y productos médicos y de atención a la salud que no se considera actualmente parte de la medicina alopática convencional8. Siendo la medicina complementaria aquella que se utiliza conjuntamente con la medicina convencional y la medicina alternativa la que se utiliza en lugar de la convencional.

 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) apoya el uso de las MAC, siempre y cuando éstas hayan demostrado su utilidad para el paciente y representen un riesgo mínimo. Aunque también alerta que a medida que aumenta el número de personas que las utilizan, los gobiernos deben contar con instrumentos para garantizar que todos los interesados dispongan de la mejor información sobre sus beneficios y riesgos.

 

En nuestro ámbito sanitario se desconoce la repercusión económica global que tienen las MAC, entre otras cosas porque no hay referencias bibliográficas de calidad, tampoco existe ningún tipo de registro fiable que nos aproxime al número de profesionales sanitarios y no sanitarios que realizan estos tipos de terapias y, por tanto, no se puede realizar una aproximación al número de visitas que realizan, el consumo de remedios o tratamientos, etc. En Europa se ha realizado algún informe sobre lo que representa el consumo de fármacos, y se cree que entre un
20 y un 25% de los ciudadanos de la Unión Europea (UE) utilizan medicamentos homeopáticos, y que éstos representan entre un 1 y un 2% del volumen del negocio de la industria farmacéutica europea9.

 

Podemos encontrar diferentes regulaciones europeas en cuanto a las MAC, tanto en lo que se refiere a la integración de éstas en el Sistema Nacional de Salud como en cuanto a los profesionales que las practican y los requisitos formativos para las mismas. El Parlamento Europeo ha emprendido diversas iniciativas para minimizar estas diferencias en sus Estados miembros. En la UE está regulado y reconocido el tratamiento homeopático, en cuanto está recogido en la ley que garantiza el uso racional del los medicamentos que utilizan los estados miembros. También existe normativa europea concreta para la utilización de las plantas medicinales, aunque difiere normativamente la regulación de la comercialización entre los diferentes países.

 

En cambio, en España no existe actualmente ninguna regulación para la práctica de las MAC. Los profesionales sanitarios pueden practicarlas como parte de su ejercicio profesional. Si la persona que ejerce cualquier modalidad de MAC no es un profesional sanitario, lo único que se le exige actualmente es que se dé de alta del Impuesto de Actividades Económicas a efectos impositivos. Por lo tanto, podemos decir que existe un auténtico desorden en cuanto a que no hay ninguna regulación por la cual un profesional sanitario deba acreditar competencia en este campo, ni se le exige ningún control de calidad, pero aún es más grave el hecho de que no hay regulación de ningún tipo en cuanto a la forma de aplicación de estas terapéuticas en personas que no disponen de ninguna titulación profesional sanitaria. Es obvio y sobre todo necesario que en los próximos años se regule la práctica de estos tipos de terapias.

 

Los estereotipos de pacientes que usan estas terapias se asocian a un estilo de vida alternativo, pero esto no está sustentado en ninguna evidencia10. Se sostiene que los usuarios de las MAC rechazan la medicina convencional bajo el principio de que ésta les ha engañado o no ha cubierto sus expectativas, o que hacen uso de éstas porque la medicina alopática está deshumanizada, aunque nada de lo anterior es del todo falso ni todo cierto. Estudios cuantitativos y cualitativos muestran que personas que usan MAC han seguido durante largo tiempo la medicina convencional y ésta no les ha dado una solución a su problema, no ha sido del todo efectiva o les ha ocasionado un efecto adverso, aunque después de un tiempo vuelven a utilizar la medicina convencional o utilizan las dos. Otras de las razones que pueden explicar este incremento del uso de los tratamientos alternativos es la creencia en que, al ser en muchos casos remedios naturales, son más seguros y no producen efectos secundarios11.

 

Los estudios han demostrado que los usuarios que utilizan las MAC tienen más morbilidad psicológica y un mayor escepticismo, unido a un incremento de experiencias negativas con la medicina alopática. Se han identificado algunas heterogeneidades en los usuarios de diferentes terapias; así, las personas que utilizan la acupuntura tienden con mayor frecuencia a padecer enfermedades crónicas y problemas osteomusculares, así como a estar más insatisfechos con los tratamientos convencionales y con su médico de familia.

 

No hay que olvidar la importancia cultural ligada a otros tipos de creencias más antropológicas: los pacientes utilizan las MAC porque somos seres humanos, racionales, pero también tenemos un razonamiento mágico. Una parte de nosotros razonamos y creemos en el conocimiento científico, pero otra «razona de manera antropomórfica, eleva nuestra biografía a rango de significado y busca en los resortes de la voluntad consciente o inconsciente, o en los vericuetos de nuestra vida, para encontrar justificaciones»12 a aquel problema de salud concreto. Por tanto, podríamos afirmar que posiblemente estos tipos de terapias contentan a esta parte más mágica de nuestro racionamiento. De esta forma, se busca en las MAC todo aquello que posiblemente no nos aporta la medicina alopática.

 

De las características de las personas que usan MAC10 que se han constatado en estudios epidemiológicos destacan que de un 55 a un 65% son mujeres, porcentaje parecido de las que utilizan la medicina convencional; los más utilizadores son o bien menores de 30 años o mayores de 65; los niños menores de 14 años generalmente utilizan la homeopatía; son utilizadas por grupos sociales con elevado poder adquisitivo y alto nivel cultural, aunque haya la creencia de todo lo contrario; es frecuente que las utilicen de forma combinada con la medicina convencional y que no lo comuniquen a su médico de familia, cosa que puede provocar problemas de interacciones con fármacos o con otras terapéuticas que se les estén administrando.

 

En general, existe un gran desconocimiento por parte de los médicos de familia de lo que son las MAC. Esto hace que no se informe adecuadamente a los pacientes sobre este tipo de terapias, en cuanto a su eficacia o a sus riesgos, ni se suele preguntar sobre su utilización. Se debería promover el abordaje en profundidad durante el grado y el posgrado de lo que son, qué eficacia se les atribuye, cómo actúan y qué potenciales indicaciones y contraindicaciones poseen. El conocimiento de éstas hará que se tengan en cuenta al realizar la anamnesis ante problemas de salud e incorporarlo al historial clínico, y esto alertará sobre posibles interacciones entre los medicamentos que está tomando o las posibles contraindicaciones según las patologías que padezca el paciente y las terapias de MAC que utilice. En un estudio realizado en España en un centro de salud3 se demostró que un alto número de pacientes tomaban remedios naturales que podían interferir con medicamentos que tomaban pero que en la casi totalidad de las historias revisadas no figuraban.

 

A continuación se revisan las MAC más utilizadas en nuestro ámbito, y se explica qué son, su eficacia y sus posibles riesgos. No se abordan las plantas medicinales dado que esta publicación ha realizado una revisión recientemente.

 

Acupuntura

La acupuntura forma parte de la medicina tradicional china, y se basa en el concepto de energía vital equilibrada o Qi (se pronuncia chi) que se cree que recorre el cuerpo de la persona. Los que practican este tipo de medicina sostienen que el Qi regula el equilibrio espiritual, emocional, mental y físico, y está afectado por las fuerzas opuestas del ying o energía negativa y el yang o energía positiva, las cuales tendrían que mantenerse en equilibrio. Cuando se produce una alteración del flujo del Qi de energía que conlleva un desequilibrio entre el ying y el yang se desencadena la enfermedad.

 

La energía denominada Qi fluye por unos canales invisibles llamados meridianos ping luo, que se distribuyen por todo el cuerpo. La acupuntura intenta equilibrar esta energía mediante la punción de agujas en determinados puntos de estos canales o meridianos. Se consideran puntos de punción aquellos en los que los meridianos transportan el Qi más cerca de la superficie corporal. Existen unos 400 puntos de punción, que reciben un nombre específico y están señalados individualmente en los dibujos y esquemas corporales. Hay 12 meridianos, seis considerados ying y los seis yang, con numerosos canales menores que interconectan todo el cuerpo. Cada meridiano se relaciona con cada órgano y función.

 

Los acupuntores suelen combinar otras técnicas, entre las que suele ser más frecuente la estimulación manual, la digitopresión o acupresión, y la electropunción. Una forma que también se ha puesto muy de moda es la auriculoterapia, sobre todo utilizada para tratar problemas de obesidad o de abuso de sustancias (alcohol, drogas y tabaco).

 

Se utilizan unos nueve tipos de agujas que varían en longitud, grosor, y en la forma de la cabeza; los grosores van de 0,18 a 0,35 mm de diámetro, y de 2,5 a 12 cm de largo. La técnica de punción viene dada por el grado de inclinación, la profundidad y la forma de realización. En general, la punción no suele ser dolorosa, pero depende del grosor de la aguja, de la profundidad a la que se inserta y de la sensibilidad del paciente. La respuesta a la terapia suele aparecer entre las 8 y las 12 semanas, aunque puede variar según el tipo de problema y la cronicidad del mismo.

 

A pesar de su gran aceptación popular, existe un gran rechazo a esta terapia por parte de la medicina convencional, fundamentalmente por la falta de explicación fisiopatológica de su mecanismo de acción. Se pueden describir numerosas teorías, ninguna de ellas comprobada científicamente (tabla 1).

 

Se han publicado múltiples estudios sobre acupuntura en revistas biomédicas, pero muy poco de ellos están realizados con una metodología adecuada que permita llegar con seguridad a conclusiones sobre su eficacia. En el año 200513,14 se realizaron dos ensayos clínicos que pueden considerarse de elevada calidad, en los que se comparó la eficacia de la acupuntura frente a la acupuntura placebo y el placebo en el tratamiento de la cefalea. Se considera acupuntura placebo aquella que se realiza mediante la punción en los puntos que no son considerados Qi. Pues bien, no se observaron diferencias entre la acupuntura y la acupuntura placebo (p%u2005=%u20050,12), pero se halló una importante diferencia entre la acupuntura placebo y el placebo (p%u2005<%u20050,001). En el año 2009 los mismos autores concluyen en otra revisión Cochrane que parece ser que la acupuntura es tan eficaz como los tratamientos farmacológicos, y con menos efectos indeseables en el tratamiento preventivo de la migraña15.

 

En 2009 se publicó una revisión sobre la eficacia de la acupuntura en el tratamiento del dolor16 que analizaba 13 ensayos clínicos que incorporaban a más de 3.000 pacientes con diferentes tipos de dolor. En todos los ensayos, los pacientes fueron asignados de forma aleatoria a los grupos; no hubo, como es lógico, doble ciego. Entre estos dos tratamientos se encontró una diferencia de –0,17, que correspondía a 4 mm en una escala visual analógica de 100 mm. Se encontraron diferencias estadísticas entre la acupuntura placebo y el placebo. La conclusión de la revisión señala que el efecto analgésico de la acupuntura no parece tener relevancia clínica ni se puede aislar de distintos sesgos. Por lo tanto, no está claro si las punciones alivian el dolor independientemente de los efectos psicológicos que produce el ritual del tratamiento.

 

Diversas revisiones de la colaboración Cochrane sobre su efecto en diferentes tipos de dolor también concluyen que no está claro el efecto analgésico de esta terapia. Tampoco se encontraron diferencias entre otros metaanálisis cuando comparaban acupuntura frente a acupuntura placebo en el tratamiento del dolor lumbar bajo, aunque fue superior a no realizar tratamiento. Se concluye que estos tratamientos pueden ser un buen complemento a otras terapias convencionales17-19.

 

En la bibliografía médica está descrita la utilización de acupuntura en una lista muy amplia de procesos patológicos, aunque existe muy poca evidencia sobre su eficacia. Entre los que se ha demostrado eficacia, se encuentra el tratamiento de las náuseas posquirúrgica y posquimioterapia, en la artritis de rodilla y en la epicondilitis. Por ahora, no existe evidencia sobre la eficacia de esta terapia en la depresión, el asma, ni en la cesación del tabaquismo20.

 

La acupuntura se asocia con muy pocos efectos adversos, aunque se han descrito algunos problemas serios, como la punción de órganos internos o la producción de neumotórax, el contagio de hepatitis o de infecciones epiteliales o celulitis21,22. Estas últimas se deben a un proceso inadecuado de esterilización del material. También se han descrito cuadros vasovagales o punciones sobre zonas nerviosas que han producido parálisis, o hemorragias por punciones de vasos.

Homeopatía

Es una de las MAC más extendidas, la que más ha aumentado su utilización en los últimos años, y también la que presenta más controversias.

 

Debido al vacío legal existente, también la practican personas sin formación sanitaria de ningún tipo. Todo esto da lugar a que no se pueda asegurar que los pacientes reciban una atención adecuada, siendo éste el mayor riesgo que se deriva de esta situación.

 

La homeopatía es un método terapéutico que apareció en Europa hace más de dos siglos, a partir de los trabajos y observaciones de un médico alemán llamado Samuel C. Hahnemann (1755-1843). Esta terapia se aplica a todo tipo de enfermedades, aunque las que más comúnmente trata suelen ser los problemas alérgicos, algunas enfermedades infecciosas como la otitis media, problemas ginecológicos, procesos gastroenterológicos, hepatitis crónica, depresión, hipertensión o la migraña. Se trata de un tipo de terapia muy criticado porque se considera que el efecto que produce no difiere del efecto placebo. Se argumenta también que en los estudios en los cuales se concluye que es eficaz se encuentran errores o sesgos metodológicos que invalidan las conclusiones. Todo esto provoca que los terapeutas que utilizan esta MAC estén cada vez más alejados de la medicina convencional y, a su vez, que los médicos alopáticos la rechacen de forma total.

 

Se basa en la aplicación del «principio de similitud» (similia similibus curentur: lo similar cura con lo similar) y dilución, que significa que cantidades muy pequeñas del medicamento o sustancia a suministrar, curarían síntomas o enfermedades que esta misma provocaría si las utilizáramos en altas dosis o más concentradas. Con la sustancia se van realizando diluciones progresivas, con agitaciones y sacudidas repetitivas (potenciación o dinamización) de la sustancia que queda, pudiendo llegar a tal dilución final que no detecte la presencia de la molécula original. Según esta práctica, mientras más diluida esté la sustancia más potencia terapéutica y las agitaciones o sacudidas aumentan sus propiedades. Este concepto, que es el principal para la teoría homeopática, también sirve a los críticos para asegurar que al no existir prácticamente nada de sustancia original no puede tener ningún efecto beneficioso.

 

La enfermedad, para la homeopatía, es un concepto más espiritual (energético−«fuerza vital») que físico, que se manifiesta principalmente con síntomas emocionales, que si no se tratan de forma adecuada afectan a la psique, presentando manifestaciones conductuales o adaptativas y, finalmente, si continúan evolucionando, se manifestarán físicamente. Por lo tanto, la enfermedad se debe a una alteración de la armonía de la «fuerza vital» que posee el individuo, rechazando la causa directa de un agente físico concreto. No niegan que en algunas enfermedades se encuentre un agente causal, pero consideran que para que éste afecte al individuo debe existir esta alteración de la armonía energética.

 

Se pueden utilizar diversos tipos, variedades y combinaciones de medicaciones ante un determinado diagnóstico en dependencia de la forma de presentación clínica del proceso. Existe un listado de medicación asociado a determinados síntomas, denominado Materia médica. Este listado se realizó utilizando voluntarios sanos y observando los síntomas que producía la sustancia, tanto físicos como mentales o conductuales. Posteriormente, y según la sintomatología descrita para aquella sustancia, se utiliza para el tratamiento de aquellos síntomas o signos realizando la dilución máxima posible. Por tanto, la Materia médica consiste en un listado de remedios y síntomas que permiten identificar el más adecuado para cada caso. Actualmente están descritos más de 3.000 remedios, de los cuales se suele utilizar un centenar de forma más común.

 

En estudios llevados a cabo para demostrar su eficacia sobre múltiples problemas de salud se constata una metodología de baja calidad. Se han publicado en los últimos años algunos metaanálisis y revisiones de estudios realizados en diversas patologías (artritis, asma, demencia, prevención de la gripe, etc.) en los cuales se llegaba a la misma conclusión después de excluir los estudios en los que había sesgos metodológicos importantes: la homeopatía no difiere en cuanto a eficacia, es decir no difería estadísticamente, a la que se observaba con el placebo. Por lo tanto, hasta ahora las evidencias que existen concluyen que el efecto de mejoría o de curación se debe al efecto placebo de este tipo de terapia, y se recomienda en todas las publicaciones la necesidad de realizar ensayos clínicos metodológicamente apropiados para demostrar realmente la eficacia o no de esta terapia23,24. A pesar de estos estudios, y de múltiples editoriales en revistas biomédicas de prestigio que ponen más que en duda su eficacia, la homeopatía no ha dejado de utilizarse ni de incrementar su uso.

 

Más problemático resulta el hecho, descrito en algunas publicaciones, de la recomendación del abandono de la medicación en pacientes con una patología grave, que en algunos casos llegaron a morir al detener la medicación instaurada por un profesional que utilizaba terapéutica convencional25. También es frecuente que los practicantes de estos tipos de terapia aconsejen a sus pacientes que no utilicen ningún tipo de inmunización, con lo cual aumenta el riesgo de presentar algún tipo de patología en la que claramente está demostrada su efectividad preventiva.

 

Los efectos indeseables de los tratamientos homeopáticos son realmente muy infrecuentes, aunque tampoco se pueden asegurar dado que no existe ningún tipo de registro fiable y son pocos los profesionales de la homeopatía que los declaran.

 

Osteopatía

La osteopatía es un método terapéutico y diagnóstico que se basa en la premisa de que el papel primordial del médico es facilitar al organismo su inherente capacidad de autocuración. El iniciador de esta terapia fue el médico americano Andrew Taylor que, en 1874, extendió esta técnica por Estados Unidos y, posteriormente, se divulgó por Europa. Es considerada por muchos países como una especialidad más de la medicina convencional y no como complementaria.

 

Sostiene que la estructura y la función del organismo es inseparable en su conjunto y que, por lo tanto, la alteración de un órgano repercute en todos los demás sistemas. Se considera que el sistema neuromuscular desempeña un papel fundamental en el mantenimiento de la hemostasia, debido a la asociación que se establece entre la columna vertebral y el sistema nervioso autónomo. Esta asociación se cree que es uno de los mecanismos por los cuales los cambios en el sistema musculosquelético pueden afectar otros órganos o permitir que una patología visceral se manifieste como alteraciones de la consistencia del tejido de las articulaciones intervertebrales. Estas alteraciones son llamadas «disfunciones somáticas» y ayudan en el proceso diagnóstico de los problemas musculares y viscerales.

 

Para los médicos osteópatas, la manipulación ósea no es considerada como sustituta de la medicina convencional, ni se contrapone a otros tipos de terapia.

 

La manipulación osteopática posee alrededor de un centenar de procedimientos o técnicas diferentes, todas ellas agrupadas en seis tipos de procedimientos (tabla 2).

 

Se cree que la manipulación causa efectos mecánicos, neurofisiológicos y psicológicos, al ayudar a restaurar la posición normal y la relación de las vértebras entre ellas reduciendo la protrusión del disco. Neurofisiológicamente, se estimulan las terminaciones terminales de los receptores mecánicos, provocando una inhibición de las células presinápticas de la sustancia gelatinosa a nivel del asta posterior, lo que reduciría la actividad nociceptiva. La manipulación también provocaría, según parece, un aumento de las endorfinas, del contenido de agua en el colágeno y en las estructuras cartilaginosas, estimula la síntesis de glicosaminoglicanos, y aumenta el umbral del dolor y la lubrificación de las superficies articulares.

 

Se sabe que la inmovilización prolongada de las articulaciones produce la formación de zonas de colágeno anómalo, pues bien, mediante la manipulación se produciría la lisis del colágeno anómalo y facilitaría la formación del colágeno normal. Asimismo, la manipulación también provocaría la descompresión nerviosa y mejoraría la microcirculación del nervio.

 

Tampoco hay que olvidar los efectos relajantes y la acción psicológica que tiene la manipulación manual de cuerpo, los pacientes lo relatan como placentera, relajante y reductora del dolor.

 

Existen revisiones sistemáticas y metaanálisis que concluyen que la manipulación espinal26,27 es efectiva y segura en el tratamiento del dolor lumbar agudo y crónico. Se ha utilizado la osteopatía también como tratamiento complementario en la enfermedad de Parkinson, y ha demostrado que resultó eficaz en la mejoría de la sintomatología en un grupo de pacientes aunque hubo importantes problemas metodológicos.

 

Se ha utilizado en el tratamiento de múltiples patologías pero no existen evidencias con la potencia metodológica adecuada como para dar suficiente consistencia a las conclusiones28.

 

Es difícil hablar de seguridad de esta técnica ya que no existen registros ni obligatoriedad de comunicar posibles complicaciones, por lo tanto, se puede deducir que existe un infradiagnóstico. A partir de la bibliografía consultada, se puede decir que es una técnica bastante segura. En un grupo de 15 ensayos clínicos que utilizaron manipulación, no se observó ningún tipo de efecto adverso29. Como conclusión, bastante obvia, la bibliografía recomienda que para evitar y prevenir problemas se debe excluir a los pacientes que presentan contraindicaciones.

Quiropráctica

La fundó, en Estados Unidos, a finales del siglo xix, Daniel David Palmer, y hoy día está extendida por prácticamente todos los países del mundo desarrollado. En EE.UU. y otros países, existe una formación médica universitaria específica y no es considerada una terapia alternativa, sino una forma de tratamiento que complementa la medicina convencional.

 

El término proviene de la combinación de las palabras griegas praxis (acción o tratamiento) ycheir (mano o con la mano), y por lo tanto describe la forma de actuar, es decir, de realizar tratamientos con las manos.

 

La quiropráctica sitúa el sistema nervioso como centro de regulación de la salud y del bienestar corporal. Su filosofía considera que la enfermedad se produce por un desequilibrio del balance neurofisiológico del cuerpo. Este dese-quilibrio se intenta arreglar mediante el diagnóstico y la corrección de las anormalidades o subluxaciones de la columna vertebral. Existen numerosas técnicas y variaciones de éstas, aunque la manipulación vertebral está considerada como el eje fundamental del tratamiento quiropráctico.

 

La estructura vertebral se explora, mediante observación y palpación, para detectar posibles dismetrías o zonas dolorosas y se realiza un examen de movilidad pasiva y activa. La exploración es fundamental tanto para indicar el tipo de técnica a utilizar, como para diagnosticar los casos que podría estar contraindicada, por el riesgo que produciría, como en casos de tumores, infecciones, inestabilidad articular, etc.

 

Mediante la manipulación, se intenta llevar una articulación más allá de su campo de movimiento fisiológico pero sin sobrepasar el límite anatómico. Con esto se consigue realizar un movimiento en que al final se oye una especie de chasquido articular, que se conoce como cavitación. La cavitación produce un aumento de la amplitud del movimiento articular, tanto mecánicamente como por reducción del reflejo doloroso que produce. Se cree que esta estimulación se debe a un efecto sobre los receptores articulares y musculares, que provoca una relajación por la acción de este reflejo sobre la musculatura paraspinal y de otras áreas de la columna y de las extremidades. En los estudios revisados no se ha encontrado ninguna relación entre la presencia o no de «chasquido» con la mejora de la ampliación de movimientos30.

 

La quiropráctica se aplica fundamentalmente para el tratamiento de problemas de la columna, sobre todo en lumbalgias. Las dos técnicas comúnmente empleadas son la compresión de retroceso y la rotatoria. En el primer caso, el paciente se debe colocar en decúbito prono sobre una mesa especial que se mueve hacia abajo y el quiropráctico realiza las manipulaciones necesarias para establecer la situación estable. En la segunda técnica el paciente se colocará con la parte superior del cuerpo torcido en sentido opuesto a la pelvis, seguidamente se aplican compresiones firmes y de corta duración en la columna.

 

En las patologías articulares crónicas, la realización este tipo de manipulación provoca la separación de las adherencias articulares que se van produciendo, mejorando de esta forma la movilidad. También se cree que la manipulación mejora el tono arterial mediante la estimulación del sistema autonómico a través de los reflejos que se producen por el aumento de la amplitud de movimiento.

 

El problema de salud sobre el que más comúnmente se aplica es el dolor lumbar. En general, los ensayos publicados presentan los mismos problemas metodológicos que los ya descritos para otras MAC. Los datos de estudios sobre patologías que no sean el dolor lumbar no demuestran que este tipo de terapia resulte eficaz en comparación con tratamientos estándar. Existe un metaanálisis31 que concluye que este tipo de terapia es más efectiva que otros tipos de terapias manipulativas sobre el dolor lumbar agudo o crónico, pero no superior al tratamiento con analgésicos o fisioterapia. Tampoco resulta ser más coste-efectivo que otros tratamientos para el dolor lumbar32. Lo más beneficioso que se objetiva en los estudios es que los pacientes presentan mayor satisfacción frente a tratamientos no manipulativos.

 

En cuanto a problemas secundarios o efectos adversos, se han descrito fracturas vertebrales al manipular las cervicales, otras son mucho más raras, como la rotura traqueal o disección de la arteria carótida. La incidencia de complicaciones graves es bastante baja.

 

Suplementos

La definición de suplemento es compleja e incluye un gran número de productos con diferentes características. Desde un punto de vista objetivo, el Medical Subject Headings define los suplementos dietéticos como productos en cápsula, tableta o líquido que proporciona nutrientes esenciales, como vitaminas, minerales esenciales, proteínas, hierbas o sustancias nutricionales similares33. En la actualidad, dentro del catálogo de suplementos encontramos, además, los llamados probióticos, microbios vivos cuyo efecto se produce a nivel intestinal.

 

No existen estudios con suficiente calidad para valorar adecuadamente su eficacia.

 

Sobre lo que se llama micronutrientes (minerales, vitaminas, etc.), sólo cabe destacar que la OMS ha determinado que su deficiencia, en concreto de algunos como el hierro, el yodo o las vitaminas del grupo B, constituye un grave problema de salud mundial por su elevada prevalencia. Si bien es cierto que estos déficit son especialmente frecuentes en países subdesarrollados, se dan también en grupos de exclusión en los países desarrollados34.

 

Musicoterapia

Se define, según la Comisión de Práctica Clínica de la Federación Mundial de Musicoterapia, como «el uso de la música y/o sus elementos musicales (sonido, ritmo, melodía y armonía) realizada por un musicoterapeuta cualificado con un paciente o grupo, en un proceso creado para facilitar, promover la comunicación, las relaciones, el aprendizaje, el movimiento, la expresión, la organización y otros objetivos terapéuticos relevantes, para así satisfacer las necesidades físicas, emocionales, mentales, sociales y cognitivas. La musicoterapia tiene como fin desarrollar potenciales y/o restaurar las funciones del individuo de manera tal que éste pueda lograr una mejor integración intrapersonal y/o interpersonal y, consecuentemente, una mejor calidad de vida a través de la prevención, la rehabilitación y el tratamiento».

 

Pese a que la definición de musicoterapia en las bases de datos biomédicas data de 1974, existen pocas publicaciones indexadas sobre musicoterapia. De hecho, esta materia no está incluida en el National Center for Alternative Medicine, y no hay un encuadre homogéneo en la bibliografía dentro de las denominadas Medicinas Alternativas.

 

Existen al menos 19 metaanálisis publicados entre el 2002 y el 2009, de los cuales podemos ver en la tabla 3 las indicaciones para las que se ha usado y la evidencia científica que se desprende de ellos.

Aromaterapia

Es el uso de fragancias y esencias de las plantas que afectan o alteran el humor o el comportamiento y facilitan el bienestar físico, mental y emocional. Los componentes químicos comprenden aceites esenciales de plantas con un uso histórico en África, Asia y la India.

 

Algunos autores e instituciones, como el National Cancer Institute norteamericano, consideran la aromaterapia una variedad del uso de Plantas Medicinales, y sitúan su empleo en la demanda social de actuaciones naturales, no relativas a productos químicos como adyuvantes de la medicina tradicional.

 

Pese a que en sentido estricto se utilizan aceites esenciales, también pueden usarse aromas sintéticos, que comparten una buena parte de los componentes, aunque algunos aromaterapeutas los consideren inferiores al no ser naturales.

 

La práctica de la aromaterapia puede realizarse mediante diversas vías:

  • Inhalación vía difusión.
  • Gotas de aceite situadas junto al paciente (p. ej., en una almohada).
  • Masaje con aceites esenciales diluidos en un aceite que sirve de vehículo.
  • Otros: baños, lociones, etc.

Resultados clínicos:

1. Estudios realizados en pacientes con cáncer

La completa revisión de estudios en pacientes con cáncer que presenta el National Cancer Institute se puede resumir en la falta de evidencia científica del tratamiento con aromaterapia (disponible en: http://www.cancer.gov). Los resultados son contradictorios tanto para la mejora del dolor como para la disminución de la ansiedad o la mejora de los síntomas físicos o psicológicos46-48.

 

2. Estudios realizados sobre dolor del parto

Una revisión Cochrane no halla evidencia de la utilidad del tratamiento con aromaterapia para disminuir el dolor del parto. Es preciso señalar que sólo se pudo incluir un estudio con 22 pacientes49.

 

3. Estudios realizados sobre demencia

Otra revisión Cochrane sólo halla dos ensayos clínicos, no pudiendo incluir ninguno de ellos en el metaanálisis al no presentar los resultados del modo adecuado50.

 

4. Revisiones generales

En una excelente revisión, del año 2000, se revisan múltiples ensayos clínicos con diferentes tratamientos e indicaciones. Su conclusión es que podría tener un efecto transitorio sobre la reducción de la ansiedad, pero no hay evidencia de que este efecto perdure, y considera que no hay motivo para la introducción y el uso de la aromaterapia en los cuidados clínicos habituales51.

 

En cuanto a efectos secundarios, se conocen casos, aunque infrecuentes, de dermatitis, especialmente en el contexto del masaje aromaterápico. Algunos aceites esenciales como el alcanfor pueden causar irritación local, según sensibilidades. También los aceites esenciales (especialmente los cítricos) pueden causar fototoxicidad, si se aplican previamente a la exposición solar52-53.

 

Masajeterapia

Aunque el propio nombre lo indique, no está de más recordar la definición que nos ofrece el Medical Subject Headings: «grupo de manipulaciones sistemáticas y científicas de los tejidos del cuerpo, realizadas con las manos, con el objetivo de modificar los sistemas nervioso y muscular y la circulación general».

 

Los masajes no están exentos de riesgos y se desaconseja el masaje vigoroso en pacientes con trastornos de la coagulación, plaquetopenia o que toman anticoagulantes. Por otro lado, deben evitarse ante infecciones cutáneas, heridas abiertas o en pacientes con osteoporosis grave o metástasis óseas, y también si han sufrido cirugía reciente.

 

El análisis de los principales metaanálisis publicados permite reseñar un breve resumen (tabla 4) para las diversas indicaciones en que se ha analizado su eficacia.

Naturopatía

La naturopatía es un sistema médico completo, compendio de creencias y actitudes ante la salud. Se basa en
tratamientos considerados naturales, evitando los fármacos. Como sistema de creencias combina diversas
terapias, pudiendo utilizar plantas medicinales, homeopatía, masajes, hidroterapia, ejercicio físico, dieta, suplementos vitamínicos, meditación, etc.

 

La práctica de la naturopatía se basa en seis principios clave:

  1. Promover el poder curativo de lo natural.
  2. No dañar. Combinar terapias con mínimos efectos secundarios.
  3. Tratamiento holístico de la persona. Se desarrolla un tratamiento «a medida» para cada paciente, en función de factores físicos, mentales, genéticos, etc.
  4. Tratamiento de la causa: identificar la causa y tratarla, y no limitarse a los síntomas.
  5. La prevención es la mejor cura.
  6. El médico como maestro. Los profesionales de la naturopatía consideran importante educar a sus pacientes en tomar responsabilidad de su salud.

La valoración de la evidencia científica en naturopatía debería desarrollarse específicamente para cada una de las terapias utilizadas. Sin embargo, existen algunos ensayos clínicos que intentan evaluar la eficacia de tratamientos naturoterápicos comparados con tratamientos tradicionales. El análisis de los diversos ensayos clínicos no permite decir que exista evidencia científica de eficacia de la naturoterapia. En definitiva, no hay evidencia de la eficacia de la naturoterapia, y dado que no existe una estandarización de los tratamientos puede resultar imposible realizar estudios al respecto. En este sentido, la única opción es analizar cada una de las terapias utilizadas por la naturopatía por separado64-66.

 

Resumen

Se ha producido un auge muy importante en la utilización de las MAC en nuestro ámbito en los últimos años. Los médicos de familia han de conocer los diferentes tipos de MAC y su eficacia y, sobre todo, deberían recoger en la anamnesis y en la historia clínica si los pacientes las utilizan y en caso positivo, qué tipo y las posibles interferencias que puedan producir con la terapia alopática. En España no existe regulación para la práctica de este tipo de terapias. El problema fundamental para evaluar la eficacia de este tipo de terapias es la falta de estudios con una adecuada calidad que nos permitan llegar a resultados concluyentes. La acupuntura podría utilizarse como terapia complementaria en algunos problemas de salud, como sería el dolor lumbar y algunos otros tipos de dolor, aunque no se puede concluir que sus resultados no sean debidos al efecto psicológico del ritual. La homeopatía, a pesar de ser la MAC más utilizada, no se ha demostrado que tenga una eficacia superior al placebo. La osteopatía y la quiropráctica han demostrado ser útiles como tratamiento complementario en procesos osteomusculares, sobre todo en el dolor lumbar. En el resto de las MAC los estudios realizados son de baja calidad, lo que impide valorar adecuadamente su eficacia.

 

Lecturas recomendadas

Caminal J. ¿Medicinas complementarias o alternativas? Un dilema para el sistema público. Aten Primaria. 2005;35(8):389-91.

Caminal J, Rodríguez N, Molina JL y Grupo de investigación en MCA. Las medicinas complementarias y alternativas y su contribución al sistema sociosanitario: el qué, el porqué y el cómo. Aten Primaria. 2006;
38:409-12.

Urios C, Caminal J, Rodríguez N, Puigpelata F y Grupo de investigación en MCA. Estrategias regulativas para las medicinas complementarias y alternativas: hacia un modelo de entendimiento de prácticas de salud. Aten Primaria. 2006;38:574-6.

Alonso MJ, Albarracín G, Caminal C, Rodríguez N y Grupo de investigación en MCA. Práctica y productos terapéuticos en medicinas complementarias y alternativas, ¿mercado regulado o mercado libre? Aten Primaria. 2008;40:571-5.

Se trata de una serie de artículos monográficos publicados en la misma revista sobre determinados aspectos problemáticos de las MAC en nuestra sociedad y en nuestro sistema sanitario. Consideramos que son de interés por la visión global con la que están realizadas y por la claridad y la profundidad del abordaje con las que están hechas estas revisiones.

 

Bibliografía

Podrá encontrar todas las referencias bibliográficas de este artículo clicar en el icono de "Ampliación de información"

 

AMF 2011; 7(1); ; ISSN (Papel): 1699-9029 I ISSN (Internet): 1885-2521

Comentarios

Josep Felix 25-08-21

En relación al anterior comentario, encuentro finalmente el artículo original, donde se comenta que: "The Amsterdam Medical Disciplinary Tribunal has struck off one doctor and suspended two others for their exclusive use of complementary treatments—including “vegatests,” homoeopathic medicine, and food supplements—to treat Sylvia Millecam, the Dutch actor and comedian who died from breast cancer in 2001 at the age of 45 (BMJ 2004;328: 485)". Aún así creo que es importante remarcar que las terapias complementarias se utilizan de muchas maneras, en función del ámbito y del profesional. Ésto también sucede en la medicina convencional. Un saludo

Josep Felix 25-08-21

Estoy revisando estos temas y quería decir que estoy de acuerdo con los argumentos de Alberto Prados. También me gustaría que el autor me aclarase el motivo por el cuál coloca la referencia de un artículo (donde se abandonó el uso de tratamiento convencional), en el bloque de homeopatía, ya que resulta tendencioso. Se trata de un artículo (periodístico!?) que habla de una paciente que murió por cáncer de mama. El artículo al que hace referencia explica que el tratamiento utilizado fue "terapia magnética" y "otras curas alternativas", no homeopatía. La recomendación de abandonar los fármacos o los procedimientos convencionales tampoco es un modo de proceder en homeópatas, y evidentemente no es propio de ésta técnica (como tampoco lo es -y también se dice- aconsejar la no vacunación...). Deberían ser más rigurosos en sus artículos. Les recomendaría que buscaran especialistas u profesionales habituados a estas técnicas porqué desde mi punto de vista ganarían en rigor.

Susana 30-01-16

Creo que se debería actualizar este artículo , al menos en acupuntura , ya tenemos estudios científicos que indican su utilidad y eficacia con fundamentación biocientífica .

Alberto 15-02-14

Su artículo coincide con el informe del ministerio en aquellos puntos en los que comparte sus sesgos; en otros aspectos del informe, al igual que en otras fuentes en las que ustedes se apoyan, también se contradice con su artículo. Que coincidan en errores, no corrige, ni repara las debilidades metodológicas de su artículo y sus consecuencias. El estudio del Gobierno Suizo es más riguroso, menos sesgado y comprueba la eficacia y coste-efectividad de la homeopatía. Cuatro metaanálisis favorables a la homeopatía y uno desfavorable (por ingeniería estadística) NO son cinco estudios desfavorables como sostienen ustedes. Las creencias y opiniones de los detractores, no deben reemplazar al análisis de los hechos (las abundantes investigaciones sobre altas diluciones), aunque contradigan las teorías mecanicistas del siglo XIX. El apego al paradigma reduccionista, no justifica la falta de rigor científico y las trampas de su artículo que por respeto a los lectores, a otros autores y a los pacientes, debieran rectificar. El Juramento Hipocrático debiera ayudarnos a superar la resistencia natural a corregir los errores clínicos e ideológicos.

Amf 03-01-12

COMENTARIO DEL AUTOR: Remito a los subscriptores a leer el informe que ha elaborado el Ministerio de Sanidad sobre terapias naturales en que informa que: La homeopatía es una técnica que ha empezado a ser evaluada con criterios de medicina basada en la evidencia en los últimos años, por lo que se puede afirmar que su evaluación científica está en sus inicios. A partir de los resultados y conclusiones de las revisiones sistemáticas publicadas, no se puede emitir ninguna recomendación basada en la evidencia que pueda influir en las decisiones clínicas sobre su uso. En general, las revisiones realizadas concluyen que la homeopatía no ha probado definitivamente su eficacia en ninguna indicación o situación clínica concreta, los resultados de los ensayos clínicos disponibles son muy contradictorios y resulta difícil interpretar que los resultados favorables encontrados en algunos ensayos sean diferenciables del efecto placebo.http://www.mspsi.gob.es/novedades/docs/analisisSituacionTNatu.pdf

Alberto 31-12-11

Pueden leer un análisis metodológico independiente sobre el estudio de Shang en: Journal of Clinical Epidemiology R. Lu¨dtke, A.L.B. Rutten “The conclusions on the effectiveness of homeopathy highly depend on the set of analyzed trials”. Las referencias de los estudios clínicos (incluyendo los cuatro metaanálisis favorables a la homeopatía), la investigación de laboratorio, estudios coste-efectividad y otros figuran en el resumen siguiente:http://www.facultyofhomeopathy.org/export/sites/faculty_site/research/evidencesummary.pdfFeliz pensamiento crítico para 2012.

Alberto 31-12-11

Existen efectos físicos y/o biológicos reproducibles y medibles de las diluciones homeopáticas sobre el crecimiento de tejidos vivos, cultivos vegetales, procesos enzimáticos, reacciones inmunológicas,... y se pueden detectar mediante diversas técnicas de imagen modernas como espectrofotometría, RNM y termoluminiscencia... Es decir, puede haber controversia en cuanto al mecanismo de acción de las diluciones, pero que tienen efecto está holgadamente demostrado aunque los detractores lo desconozcan.Respecto a que todos los estudios de calidad y metaanálisis previos son desfavorables a la homeopatía es rigurosamente falso, cuatro de los cinco metaanálisis previos son favorables a la homeopatía. El único estudio amplio que concluye que la homeopatía es placebo y el único que menciona el presente artículo es el de Shang y si analizamos su metodología podemos comprobar que de inicio a fin es un fraude, además del sesgo de selección, con las pruebas seleccionadas se puede demostrar el efecto positivo o negativo según como se agrupen los datos. Por todo ello, solicito la impugnación de la pregunta de examen que equipara el efecto de la Homeopatía al placebo por no poderse justificar de forma fehaciente con las pruebas presentadas, así como la corrección de los numerosos errores que figuran en el artículo.

Inmaculada 15-06-11

Gracias por la información, muy util y aporta claridad y complementaridad.

Marc 10-02-11

gràcias por la información, muy util, concisa y orientadora