Power Point
Caso clínico
Ampliación de información
Vídeos
Inocentadas
Diciembre 2020
Diciembre 2020

Menos presencia, más seguridad*

Isidro Segura Pizarro

Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria Equipo de Atención Primaria Dr. José María Yáñez. Castilla - La Mancha

Isidro Segura Pizarro

Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria Equipo de Atención Primaria Dr. José María Yáñez. Castilla - La Mancha

NOTA DEL COMITÉ DE REDACCIÓN

Habitualmente esta es una sección donde se exponen, de forma breve, experiencias vividas en un centro de salud que puedan ser útiles a otros profesionales. Es una sección que aparece normalmente en la versión en papel de AMF.

 

Excepcionalmente (todo lo es en el momento histórico que nos ha tocado vivir…) la publicamos en versión electrónica y en formato abierto (como hicimos anteriormente con los trabajos publicados en el monográfico sobre la COVID-19. Creemos que esta experiencia ofrece soluciones imaginativas, tecnológicamente avanzadas, para la imprescindible reorientación de la actividad de nuestros centros de salud en un momento en que todas y todos  estamos necesitados de orientaciones prácticas en ese sentido.

 

 

Desde hace muchos años, se vienen haciendo propuestas para racionalizar el uso de los servicios de Atención Primaria de Salud (APS) adecuando el tipo de respuesta del sistema a la necesidad real de atención. Dejar de hacer aquello que no aporta valor añadido, virtualizar todo aquello que no requiere visita presencial, repartir la actividad de forma razonable entre todos los integrantes del Equipo de Atención Primaria (EAP) son, entre otras, consignas repetidas pero escasamente implantadas, como si la inercia del día a día nos impidiese cambiar el paso.

 

Sin embargo, la pandemia de la COVID-19 ha transformado las propuestas en obligaciones, ha forzado cambios importantes en la forma de prestar los servicios, cambios que, como repiten orgullosos nuestros gestores, han venido para quedarse.

 

Han sido meses muy duros, de gran incertidumbre, pero en nuestro EAP, con el esfuerzo conjunto de todos, y con el apoyo de la dirección de sector y del Ayuntamiento, hemos conseguido reordenar la atención a nuestra población atendiendo a diversas premisas que nos parecían imprescindibles:

  • Mantener una adecuada accesibilidad.
  • Trabajo de los profesionales en un entorno seguro.
  • Atención a los ciudadanos en un entorno seguro.

 

A continuación describimos, a grandes rasgos, la nueva organización del centro, apoyándonos en el relato de diversos ejemplos que creemos que serán útiles para los lectores. Son cambios importantes que, estamos convencidos, han venido para quedarse en la nueva APS.

 

Atención telefónica

Esta se ha convertido en la principal vía de comunicación entre los ciudadanos y su equipo de salud1. Es la principal medida para la seguridad de ambos.

 

El teléfono se convierte en la única vía de acceso al equipo, y la visita presencial se reserva solo a aquellos pacientes que han sido citados por los profesionales sanitarios o administrativos (en este caso, siguiendo protocolos consensuados) y no se puede pedir cita presencial por teléfono o internet.

 

Las posibles urgencias que acudan al centro sin haber solicitado vista telefónica, son valoradas en la puerta por enfermería uniformada con equipos de protección individual (EPI), que decide si realmente requieren atención inmediata, o deben regresar a su domicilio para ser atendidos de forma telemática o presencial diferida.

 

Las llamadas de los ciudadanos se filtran a través del programa «wise-filter»2, recientemente adquirido por la Consejería de Salud. Se trata de un avanzado programa que reconoce y memoriza el origen de la llamada, categoriza las necesidades de atención que el ciudadano expresa, las ordena según gravedad o urgencia y las clasifica según la tipología del profesional más adecuado para atenderlas; en su versión más avanzada (3.7), que estamos empezando a usar en fase de prueba, distingue, también, aquellas demandas de atención (infrecuentes) que requerirán visita presencial en el domicilio o en la consulta. Esta categorización se muestra (y actualiza constantemente) en la pantalla del ordenador del personal administrativo, que las reparte en las agendas de los profesionales disponibles ese día. El programa tiene un servicio de «retorno» que informa automáticamente a los pacientes de que su demanda ha sido rechazada como presencial (por ser fácilmente virtualizable) o demorada (por su nimiedad).

               

Atención presencial. Doble circuito

A todo paciente al que se le ha asignado visita presencial, se le entrega en la entrada del centro una mascarilla quirúrgica, una bata larga de un solo uso, gorra y guantes. También a los acompañantes en los pocos casos en que el paciente requiere de forma imprescindible entrar acompañado. Evidentemente, los profesionales van adecuadamente protegidos (tabla 1) dependiendo de la función que realizan en ese momento.

 

Tabla 1. Equipo de protección individual según actividad

PACIENTES COVID O DOMICILIOS

PACIENTES NO COVID

ATENCIÓN TELEFÓNICA

PERSONAL ADMINISTRATIVO DE ATENCIÓN EN MOSTRADOR

Doble guante

Guantes

Guantes

Guantes

Mascarilla filtrante N95 o FFP2a

Mascarilla quirúrgica

Mascarilla quirúrgica

Mascarilla quirúrgica

Gorro

Gorro

Gorro

Gorro

Pijama de trabajo

Pijama de trabajo

Pijama de trabajo

Pijama de trabajo

Calzado de trabajo

Calzado de trabajo

Calzado de trabajo

Calzado de trabajo

Máscara facial

 

 

Pantalla de metacrilato

Gafas protectoras

 

Bata impermeable

ahttps://www.murciasalud.es/preevid/23536

 

No es ninguna novedad la imprescindible separación de circuitos de atención3, que nadie discute (excepto algunos antisistema). Pero merece la pena relatar algunos detalles que pueden ser de interés para otros centros.

 

Merece destacar que la minimización de la actividad presencial nos ha permitido que una sola médica de familia y una enfermera atiendan todas las visitas presenciales, de forma que los demás profesionales pueden dedicarse a la atención telefónica de sus pacientes intentando conseguir la máxima longitudinalidad. Esta organización de la actividad se consigue haciendo que todas aquellas llamadas telefónicas que se considere que requieren una visita presencial sean citadas en las próximas 24-48 horas en una franja horaria de COVID o de no COVID. Por ejemplo, a primera hora aquellas visitas que no presentan sospecha de COVID (son muy pocas) y el resto de la jornada las que podrían ser COVID (en el entorno actual, casi todas). La multiplicidad y heterogeneidad de la clínica de la COVID-194-7 obligan a considerar como sospechosos a todos los pacientes que presenten cualquiera de los síntomas relacionados en la tabla 2. De esta forma conseguimos que el centro sea un espacio muy seguro para toda tipología de pacientes.

 

Lógicamente, todos los circuitos nuevos requieren un tiempo de rodaje, y es seguro que en las fases iniciales se van a producir algunas disfunciones, ya sea en relación con las visitas no presenciales (tabla 3) o con las presenciales (tabla 4). Los casos presentados han sido recogidos por nuestro sistema de e-reclamaciones/sugerencias y todos ellos han sido derivados a la Comisión de Calidad que es quien nos los afina.

 

Tabla 2. Listado de síntomas que podrían asociarse a COVID-19

(Obligan a atender a quienes los presentan en espacios diferenciados del resto)

Fiebre o febrícula o escalofríos

Tos

Diarrea

Cefalea

Cualquier exantema o lesión dermatológica

Pérdida de olfato

Pérdida de gusto

Congestión nasal o rinorrea

Dolor de garganta

Astenia – disnea (a veces difíciles de distinguir)

Expectoración de cualquier tipo

Mialgias

Mareo

Congestión conjuntival

Otros, a criterio del profesional que decide la atención presencial

 

 

Tabla 3. Ejemplos de casos atendidos sin visita presencial (los nombres son ficticios)

Ante todo sensatez

Adelaida, 68 años, se ha cortado en la pierna con un vidrio al bajar la basura. Ha limpiado la herida pero no consigue que pare de sangrar y le gustaría ser visitada. La administrativa que contesta a su llamada al centro de salud le indica que solo debe acudir si necesita puntos y que haga compresión hasta que pare de sangrar; Adelaida se interesa por la duración de la compresión y se le indica: «hasta que vea que ya no sale sangre».

Paciente colaborador

Juan está preocupado por un bulto en la axila que salió hace 5 días. Después de 8 llamadas telefónicas, en 45 minutos, consigue que le atiendan en su centro de salud. La administrativa, amablemente, le indica que le llamará la médica no COVID. Cuando le llama, le indica que mejor le mande una foto de la axila. Juan le comenta que no se verá bien por culpa de los pelos. La doctora le indica que la haga después de depilarse. Él nunca lo hizo, pero va a comprar una crema depilatoria y después de aplicarla manda la foto. Al día siguiente recibe la llamada de otra doctora indicándole que no tiene ninguna importancia.

Exploraciones innecesarias

María llama al centro de salud preocupada porque su hijo, Raúl, de 10 años, se ha resfriado y «con los tiempos que corren…, y sus antecedentes de asma» la preocupan los silbidos nocturnos que mejoran con el inhalador. La doctora que atiende llamadas COVID lo cita en media hora para que la enfermera COVID le haga una PCR. A las 48 horas, María recibe una llamada del centro (doctora no COVID): «La PCR es negativa. ¿Supongo que ya no es necesario que visitemos a Raúl…?»

 

Tabla 4. Ejemplos de casos atendidos presencialmente (los nombres son ficticios)

Evitar aglomeraciones

Juana, 27 años, convive con Miguel, afectado de COVID-19. Hoy tiene dolor de cabeza y fiebre. Llega al centro de salud y se encuentra una larga cola en la calle. Cuando le toca el turno, la enfermera de cribado le indica que la atenderán en la consulta de COVID, pero que está muy llena; le ofrece un paracetamol y le indica que vuelva en una hora.

Una simple sutura

Mireya es médica de familia. Hoy ejerce de doctora de llamadas no COVID. En su agenda consta una visita de Romualdo «para sacar puntos». Fue atendido en urgencias por una caída, con sutura de tres heridas faciales. Mireya indica el error a la administrativa por ponerle esa visita (¡que podía ser directamente para enfermería a la semana para sacar los puntos!): «¡Ese programa que usáis para cribado de visitas no sirve para nada…!»).

Finalmente habla por teléfono con el paciente; le extraña su voz nasal. El paciente confirma que lleva un taponamiento; le cita para la enfermera que le comenta «no le veo bien…». Mireya lo valora: crepitación zona malar izquierda, diplopía a mirada inferior y marcha inestable. Derivado a hospital, se confirma fractura facial que requiere tratamiento quirúrgico urgente.

Los «casos sociales»

Encarna, trabajadora social, contacta por correo electrónico con Elvira, médica de familia: hace 15 días que atienden en un alojamiento para personas «sin techo» a Ricardo, que sufre de sordomudez y alcoholismo; está irritable (seguramente por la abstinencia) y ahora tiene un ojo rojo. En el correo, Encarna pide si le puede recomendar un colirio. Finalmente se recomienda al paciente que venga. Ricardo presenta hiperemia y midriasis arreactiva del ojo derecho; el oftalmólogo de guardia confirmará glaucoma agudo de ángulo cerrado.

 

El trabajo en equipo

Además de la disminución de la demanda inútil y la penetración definitiva de las nuevas tecnologías que ya hemos comentado, la pandemia ha conllevado también muchos efectos beneficiosos. Entre ellos queremos destacar que ha promovido un verdadero trabajo en equipo8, con un reparto claro de las tareas entre sus miembros y una atención más centrada en el paciente. Se acabó la arcaica concepción de que cada profesional atiende a «sus» pacientes (como si los pacientes fueran de alguien…). Todos hacemos de todo.

 

Así, cada día de la semana cada profesional tiene asignadas unas tareas concretas y bien definidas (y todos participan en ellas): atención presencial a pacientes no COVID y pacientes COVID, atención no presencial a pacientes COVID, atención no presencial a pacientes no COVID de su cupo o del de otros profesionales que tienen otras tareas, y atención domiciliaria.

 

Esta nueva situación permite a muchos profesionales trabajar con menor presión, o incluso sin necesidad de medidas de protección, mientras que solo dos (médica y enfermera) precisan de un EPI completo durante el tiempo que atienden a pacientes COVID-19. El sistema resulta muy eficiente, incluso para el uso de EPI (con dos, uno para cada profesional, durante toda una jornada es suficiente). Igualmente, se minimiza la necesidad de lavarse las manos.

 

En esa misma línea, los profesionales no precisan sacarse nunca ninguna parte del EPI ya que hemos instaurado un sistema de dictado a distancia (mediante intercomunicador, aunque estamos pensando en otras opciones) según el cual quien realiza la atención dicta a quien ese día ejerce de «escribiente», que es el responsable del registro en la historia clínica.

 

Han sido claves en el trabajo en equipo las reuniones (telemáticas) de consenso para ponernos de acuerdo en la forma de actuar, dado que si aplicamos criterios y acciones distintas se puede generar malestar entre la población.

 

Así, hemos consensuado formas de actuar específicas para problemas de salud en los que podría parecer necesaria la visita presencial, pero que realmente tenemos recursos para virtualizarlos. A modo de ejemplo, podemos enumerar algunos casos:

  • Lesiones en la piel: hemos habilitado una cuenta de WhatsApp específica y se indica al paciente que envíe la fotografía en la que debe encuadrar tanto la lesión como su tarjeta sanitaria. De este modo, se evitan errores y extravíos.
  • Cuestionarios autoadministrados: hemos generado una amplia biblioteca de cuestionarios autoadministrados que cubren un amplio abanico de problemas de salud o situaciones. Cuando se considera necesario, el cuestionario se envía al paciente por email y este lo devuelve de la misma forma. Estamos actualmente desarrollando una página web que sustituiría al correo electrónico.
  • Autoexploración dirigida: también estamos trabajando en formas de autoexploración por parte del paciente que consideramos factibles en muchos problemas de salud. Se comunicaría con el paciente por videollamada y le indicaríamos el tipo de maniobras que debería realizar mientras nosotros podríamos observarlo. Sirva de ejemplo un paciente con lumbociatalgia: él mismo, o con la ayuda de un familiar, se puede realizar las maniobras de Lasègue y Bragard, el Lasègue invertido y el talón-puntas9.

 

Estamos realmente ilusionados porque entendemos que en estas líneas de trabajo queda un amplio campo por explorar.

 

Atención domiciliaria

La atención domiciliaria es uno de los valores de la APS, sin embargo, se trata de una actividad de alto riesgo, tanto para el profesional (espacios cerrados a veces con higiene deficitaria) como para el propio paciente (contacto con posibles cargas virales externas transportadas por el propio sanitario)3.

 

No pocas veces, las visitas domiciliarias responden más a una simple demanda que a una verdadera necesidad. Por todo ello, nos hemos planteado minimizarlas al máximo. Ha sido un reto muy importante conjugar la seguridad con una correcta atención de los pacientes que precisan atención domiciliaria. Por ello se ha trabajado específicamente en el Consejo de Salud Municipal y se ha llegado a unos protocolos de actuación pactados y en los que disponemos de la colaboración del Ayuntamiento.

 

Los pacientes demandan atención a domicilio a través del teléfono1 y el sistema «wise-filter»2 (comentado anteriormente) define aquellas demandas que son susceptibles de atención domiciliaria. Estas demandas son valoradas por una enfermera de domicilios. Hay que comentar aquí que poco más de un año antes del inicio de la pandemia habíamos organizado en el EAP un equipo específico de atención domiciliaria, conformado por una médica y dos enfermeras, que eran las profesionales responsables de todos los pacientes crónicos domiciliarios. Este tipo de organización nos permitía una atención más especializada y accesible a estos pacientes. Inicialmente, hubo profesionales que no estaban de acuerdo con este modelo y preferían ver a sus pacientes crónicos domiciliarios, pero gracias a la pandemia todos han entendido las bondades del sistema, y no hay reticencias al respecto.

 

La enfermera que valora las demandas a domicilio que han superado el «wise-filter» los clasifica de entrada en crónicos (los que forman parte del programa de atención domiciliaria a los que ya conoce) y agudos. Los agudos los clasifica en tres tipologías:

  1. Los que pueden resolverse virtualmente: estos casos los pasa a las médicas que están haciendo atención no presencial de pacientes COVID o no COVID, según el caso.
  2. Los que pueden resolverse virtualmente si se dispone de algún material de apoyo diagnóstico en el domicilio (tabla 5): estos casos reciben en su casa el material necesario (servicio de entrega y recogida facilitado por la colaboración municipal) y entonces se realiza la visita virtual con videollamada para explicar cómo se utiliza, supervisar que se hace de forma adecuada y así resolver el caso. Si bien buena parte de los materiales expuestos en la tabla 5 son de fácil utilización por la mayoría de los pacientes convenientemente supervisados, algunos instrumentos pueden resultar más complejos y no ser aconsejables según las características del paciente.
  3. Los que requieren de una visita presencial: en estos casos se intenta, en lo posible, que acudan a una visita presencial.

 

En cuanto a los pacientes crónicos domiciliarios, la enfermera los clasifica en tres grupos según su necesidad real:

  1. Necesidad de conversación: se solucionan con atención telefónica o videollamada.
  2. Necesidad de supervisión: igualmente con teléfono o videollamada, en muchos casos con recepción previa en el domicilio de los materiales expuestos en el párrafo anterior.
  3. Necesidad de visita presencial.

Todos los casos agudos y crónicos que requieren atención presencial son visitados, con independencia de su problema de salud, con las máximas medidas de seguridad para el profesional (tabla 1) y el paciente (bata desechable, gorro, mascarilla y guantes). De esta forma garantizamos la máxima seguridad para ambos.

 

Tabla 5. Material de apoyo diagnóstico en domicilio disponible

MATERIAL FUNGIBLE Y NO FUNGIBLE

UTILIDAD

Torunda nasal y bote hermético.

Con o sin kit de test antigénico.

Posibilidad de realizar toma de muestra para PCR o de realizarse el test antigénico

Bote de recogida de muestra estéril o tira de orina protegida en bolsa de polietileno autoadhesiva y tabla de colores para su valoración

Recogida de muestras para cultivo de orina o análisis in situ para diagnóstico

Pulsioxímetro, esfigmomanómetro, termómetro sin contacto

Toma de constantes en los casos que se considere necesario

Glucómetro

Dispositivo de un solo uso para punción digital

Tira de glucemia capilar protegida en bolsa de polietileno autoadhesiva

Tira de glucosuria/cetonuria protegida en bolsa de polietileno autoadhesiva

Valoración de glucemia, glucosuria y cetonuria

Coagucheck®

Dispositivo de un solo uso para punción digital

Tira para INR protegida en bolsa de polietileno autoadhesiva

Valoración de INR

Paquete de gasas

Desinfectante

Quitagrapas de un solo uso

Instrucciones de utilizacióna

Retirada de grapas en pacientes después de cirugía

Electrocardiógrafo personal de 6 derivaciones y móvil con la app necesariab

Detección de arritmias, valoración de dolores precordiales…

Hemoglobinómetro portátil

Dispositivo de un solo uso para punción digital

Cubeta de recogida de muestra capilar protegida en bolsa de polietileno autoadhesiva

Sospecha o seguimiento de anemia

a https://es.wikihow.com/quitar-grapas-quir%C3%Bargicas

b https://www.alivecor.es/kardiamobile6l

 

No todo son luces

A pesar de la satisfacción generalizada por la nueva forma de organizarnos que garantiza la accesibilidad minimizando el riesgo, no debemos dejar de comentar algunos problemas que han ido surgiendo durante todo el proceso de implantación.

 

Aunque inicialmente la población entendió la gravedad de la situación y lo importante de minimizar el contacto presencial con el centro de salud, conforme ha ido pasando el tiempo algunos pacientes no han tenido la capacidad de adaptarse al mantenimiento de las medidas y, al formarse puntualmente algunas colas en la calle por pretender acceder al centro sin tener cita, se han generado situaciones de tensión importantes. Desde hace 2 meses disponemos de dos guardias de seguridad que controlan la situación de la entrada y las colas, y con ello el ambiente se ha pacificado.

 

En los primeros meses algunos pacientes frágiles se perdieron en relación al seguimiento que se les venía realizando. Sin embargo, hemos optado por entregar semanalmente a los profesionales listados de pacientes según tipología: una semana diabéticos, otra semana hipertensos, otra pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica… De esta forma proactiva estamos recuperando los contactos y controles perdidos.

 

Hemos observado algunos efectos colaterales (algunos positivos, otros no tanto) en relación con el perfil de pacientes atendidos. El amplio abanico de posibilidades de comunicación telemática con el centro ha mejorado el acceso de la población joven, mayoritariamente sana, mejorando así el contacto con un sector anteriormente alejado del sistema sanitario; ello ha facilitado la detección precoz y el cribado de problemas de salud o malestares que anteriormente pasaban desapercibidos. Hemos analizado cuidadosamente el efecto de estos cambios en el acceso a los servicios de salud en un sector de población vulnerable, como las personas mayores. Después de un análisis cualitativo, la conclusión es que el acceso no se ha visto dificultado con estos nuevos circuitos, pues ¿qué paciente mayor no dispone hoy en día de internet en su domicilio?, o ¿no tiene un hijo, nieto o vecino que en un momento dado le ayude a obtener una cita? A pesar de ello, como doble sistema de seguridad, se ha consensuado con la Consejería de Salud y el Ayuntamiento un protocolo que, a través del sistema de emergencias y de teleasistencia (muy cercanos al ciudadano y en horario de 24/7), nos alerta de sus necesidades más inmediatas. Estamos trabajando actualmente en protocolos de acceso con servicios sociales, asociaciones de inmigrantes y otras entidades similares para que nadie se quede fuera del sistema.

 

Alguno de los profesionales ha sido muy crítico con algunos aspectos del modelo que implica un cambio en la forma de trabajo y ello ha generado problemas de adaptación. El más crítico de todos ha optado finalmente por jubilarse, aunque le quedaba un año y medio, y con ello ha desaparecido el problema.

 

Somos un equipo docente y los residentes se quejaban al principio de que esta forma de trabajo podía representar un grave problema en cuanto a la calidad de su formación. Hemos tenido con ellos muchas discusiones al respecto, pero cada vez son más conscientes de que se están formando en una nueva forma de ejercer la especialidad: medicina familiar, comunitaria y telefónica.

 

Disponemos de un protocolo específico y detallado de todos los circuitos que vamos actualizando según disponibilidad y necesidades. Si algún otro equipo estuviera interesado en conocerlos puede ponerse en contacto con el autor, y se valorará la idoneidad, o no, de cederlos. Por otra parte, estamos abiertos a sugerencias y comentarios.

Puede dirigirse a: [email protected] a la Atención de Isidro Segura Pizarro.

 

Bibliografía

  1. Muñoz E. Las consultas por teléfono han llegado para quedarse. AMF 2020;16(7) https://amf-semfyc.com/web/article_ver.php?id=2656
  2. Ministerio de Ciencia e Innovación, CSIC, Excelencia María de Maeztu. Filter Profile Service. SVO, Madrid 2020. http://svo2.cab.inta-csic.es/theory/fps/index.php?id=WISE/WISE.W4
  3. Ministerio de Sanidad. Manejo en atención primaria y domiciliaria del COVID-19. Madrid 2020. https://www.mscbs.gob.es/profesionales/saludPublica/ccayes/alertasActual/nCov/documentos/Manejo_primaria.pdf
  4. Torrell G. ¿Tiene COVID-19? AMF 2020;16(9):525-531. https://amf-semfyc.com/web/article_ver.php?id=2761
  5. Michelen M, Jones N, Stavropoulou C. In patients of COVID-19, what are the symptoms and clinical features of mild and moderate cases? April 1st 2020. CEBM Oxford. [Internet.] Disponible en: https://www.cebm.net/covid-19/in-patients-of-covid-19-what-are-the-symptoms-and-clinical-features-of-mild-and-moderate-case/
  6. Torrell G. What a time to be alive: la semiología en la era del SARS-CoV-2. AMF 2020;16(7).https://amf-semfyc.com/web/article_ver.php?id=2651
  7. Alcántara PA, Ortiz F, Maestro FJ. Coronoavirus y manifestaciones cutáneas. https://amf-semfyc.com/web/article_ver.php?id=2650
  8. Barrerio C, Carreño O. El trabajo en equipo. AMF. 2011;7(2):72-81.https://amf-semfyc.com/web/article_ver.php?id=347
  9. Bordas JM, Forcada J. Explorando… el dolor de espalda: ¿Tiene una lumbociática? AMF. 2009;5(11):635-638. https://amf-semfyc.com/web/article_ver.php?id=100

*Este trabajo ha merecido el premio «Innovaciones en tiempos de COVID» que acaba de instaurar el Ministerio de Sanidad, con el patrocinio de diversas empresas productoras de vacunas y reactivos.

AMF 2020; 16(11); 2859; ISSN (Papel): 1699-9029 I ISSN (Internet): 1885-2521

Comentarios

Julio Francisco 30-01-21

Propongo ver la nota Editorial: "AP Y MALESTAR EMOCIONAL DE LO INDIVIDUAL A LO SOCIAL Y VICEVERSA" de septiembre 2016. Éste párrafo en concreto: "la relación longitudinal con sus pacientes. En este sentido, la escu-cha empática, el vínculo asistencial, la entrevista clínica o la contención terapéutica son instrumentos por sí mis-mos terapéuticos. Si bien el desarrollo de la tecnología y la biomedicina los han ignorado, son elementos funda-mentales de todo proceso asistencial y consustanciales a la AP."

Francisco Javier 05-01-21

CONCLUSIONES: 1. Nuevas tecnologías y consultas telemáticas: SÍ, pero ocupando en nuestra agenda la proporción que merece. 2. CONSULTA PRESENCIAL: hay que recuperarla en mayor proporción, tanto citada por los propios profesionales como permitiendo que los pacientes opten también por esta modalidad (o la telefónica, según su necesidad). Trabajemos en un acceso seguro al centro de salud y a sus salas de espera, ordenándolo durante la jornada, pero no lo impidamos. 3. Apostemos por un modelo de AGENDA que el propio profesional pueda gestionar en gran parte, con citas telefónicas, telemáticas, presenciales y a domicilio... intercaladas durante toda la jornada laboral, asegurando así la mejor de las accesibilidades. 4. La ATENCIÓN PRIMARIA se ha visto herida de gravedad con esta pandemia. Los pacientes están comenzando a creer que sus médicos de familia prefieren no verlos presencialmente. Y eso NO ES CIERTO. Recuperemos la esencia de la Atención Primaria y mejorémosla implantando nuevas iniciativas y tecnologías, pero con responsabilidad y sensatez...

Francisco Javier 05-01-21

4. "Hay que dotar a los pacientes de recursos para que se auto-exploren". De nuevo, cuidado con esto. Los sanitarios nos hemos formado durante años para manejar precisamente estas herramientas... No podemos pretender que los pacientes dominen su manejo de la noche a la mañana. ¿Podemos instruirlos en el manejo de algunas de estas herramientas ? ... Desde luego que sí... pero no todas. No pretendamos que un paciente se haga correctamente un electrocardiograma en domicilio. Además, una vez más el implantar el uso de estas herramientas puede generar diferencias en accesibilidad, ya que de nuevo los pacientes más ancianos y frágiles seguramente dominarán peor la autoexploración y el manejo de las mismas y accederán peor a este servicio ... (continúa)

Francisco Javier 05-01-21

3. "Los pacientes SON DE TODOS". Cuidado con esta afirmación. Evidentemente, un equipo sanitario de un centro de salud debe de poder dar respuesta a las necesidades asistenciales de todos los pacientes de ese centro, independientemente de que sean de su cupo o no. No obstante, este tipo de atención tiene sentido para cuestiones urgentes de salud. La atención a la cronicidad o la revisión de la evolución de problemas de salud complejos conviene que sea atendido por un mismo equipo de salud... siendo éste el modo más conveniente de poder asegurar la continuidad asistencial y la longitudinalidad en la misma. Va a ser verdad que en estos tiempos la longitudinalidad se va a dar en la atención en consultas hospitalarias y no en Atención Primaria... una paradoja sin sentido, desde luego ... (continúa)

Francisco Javier 05-01-21

2. El USO DEL TELÉFONO y la CONSULTA TELEMÁTICA en Atención Primaria era una asignatura pendiente que había que desarrollar sí o sí. No obstante, es un complemento más de nuestra asistencia sanitaria, pero no puede ser el eje de nuestra atención. Debemos de tener una agenda de trabajo flexible que permita citas telefónicas y telemáticas pero para resolver aquello que se pueda resolver de este modo (resultados de pruebas complementarias habiendo visto presencialmente de forma previa al paciente, dudas sobre uso de medicación, renovación de tratamientos, valoración de incapacidad temporal, etc.)... pero ¡cuidado con querer resolver todo por teléfono! Hay que ver a los pacientes. El contacto físico es esencial para valorar convenientemente potenciales problemas "graves" de salud ... (continúa)

Francisco Javier 05-01-21

Algunas consideraciones:1. "Todo paciente debe de pasar el cribado telefónico para ser atendido": Cuidado con esto. No todos los pacientes manejan bien la tecnología telefónica o telemática (APP o internet), especialmente los pacientes ancianos. Esto puede suponer un problema de accesibilidad muy importante especialmente para los pacientes que más necesitan la atención presencial: ancianos y pacientes frágiles. Confiar en un sistema pseudo-inteligente "wise-filter" como examen a superar por un paciente para ser atendido me puede parecer incluso peligroso. SOLUCIÓN: hay que volver a permitir a los pacientes pedir cita presencial. Para ello, hay que reservar citas presenciales para que un paciente, según su criterio, pueda acceder a ella. Para crear un entorno seguro dentro del centro de salud, lo único que hay que hacer es controlar el acceso de forma ordenada, pero NO IMPEDIRLO. Al igual que podemos usar el metro o el autobús, los pacientes deben de poder acceder a las salas de espera de sus centros de salud (con mascarilla y lavado de manos a la entrada, con asientos separados convenientemente e instalando renovadores de aire en las salas de espera)... PERO NO IMPIDIENDO EL ACCESO DE PACIENTES AL CENTRO DE SALUD ... (continúa)

Francisco Javier 05-01-21

Saludos, Creo que hay que analizar este artículo con sumo cuidado, intentando no caer en la asunción de estas medidas implantadas como la panacea de la Atención Primaria.Si bien al inicio de la pandemia y, ante el desconocimiento de los efectos de este virus, implantar estas medidas resultaba necesario por seguridad... bien es cierto que ahora, conocido mejor este problema de salud, deberíamos de retomar las actividades y forma de atender que caracteriza a la Atención Primaria ... (continúa)

SERGIU 01-01-21

Compañero, usted trabaja en un Centro de Salud, con las mejores prestaciones, PARAISO PROFESIONAL, segun veo. Os cuento otra realidad; En uno de los CS de la Comunidad Valenciana, la consulta de MFYC, cupo de 1500 pacientes, agenda de 32 pacientes, presenciales y no presenciales(telefonicas), ademas todas las urgencias que llegan, de cada cupo, mas las Agendas Covid-19(Covid primeras, Covid seguimento, Covid altas, lo que supone seguimento telefonico, bajas laborales y otros tramites)..y no hay médicos para cada tipo de agendas,,, no. Cada uno cura lo suyo. Hay algun compañero que acaba la jornada labral a las 17 h, 18 h y media. Que mas decia el compañero,,,teleasistencia, fotos, exploración telematica.....¿y que mas...? . Mucha suerte a todos los curantes. Salud y que Dios os bendiga!!!

Julio Francisco 31-12-20

Ante todo, felicitaciones por el coraje y valentía de implementar con tanto trabajo nuevas formas de buscar soluciones a la dura realidad.No es fácil y lleva tiempo y esfuerzo adecuarse al 100% a los desafíos del día a día.1. Como toda las estrategias y herramientas, siempre es bueno saber cuándo usarlas y cuándo no.Lo veo muy útil para gestionar las emergencias sanitarias, la pandemia, las urgencias y la demanda espontánea en general y a grandes rasgos.NO lo veo útil en:- Seguimiento de dolencias Psico-SOciales.- Pacientes crónicos complejos.- Educación para la Salud (EPS)....aunque es cierto, que en vuestro escrito contempláis el seguimiento de pacientes crónicos:a) a domicilio por un mismo equipo de enfermería ¿y medicina?.b) y que tenéis listados cada semana se seguimiento de "crónicos" por sus MAPs.2. Es cierto que no son "Nuestros Pacientes" sino que son "de sí mismos", ya que buscamos respetar la AUTONOMÍA del paciente en todo momento.Pero también es cierto que se pierde mucho de la Continuidad Asistencial y el valor añadido de la INTIMIDAD y la ALIANZA TERAPÉUTICA establecida previamente con "mi médico/a de cabecera de toda la vida"...3. Es un loable intento de bregar por la JUSTICIA/EQUIDAD asistencial, sin caer en asistencialismo, y no quedarse con los/las apacientes policonsultadores/as y subsecuentes contactos de escaso valor clínico.4. Destaco la estrategia de llegar a la ciudadanía que no tiene capacidad de pedir cita/ayuda por sí mismas, gracias a la colaboración con Servicios SOciales y el Ayuntamiento, etc.Una potente estrategia integradora de la visión para llegar a personas más vulnerables, optimizando los recursos disponibles de los Municipios, sin esperar TODO del Centro de Salud... sino "DESCENTRALIZANDO" la labor (respecto a llevar kits de test y saturómetros, etc a domiclio, luego supervisión con videolladas, etc.)Involuctra más personas dispuestas a trabajar, con altruismo, pero habrá que ver, con qué grado/déficit de formación.5. "EL OJO CLÍNICO": entiendo que residentes MIR MFyC echen en falta el entrenamiento del mismo, y lo exijan.Es frecuente encontrar en la modalidad PRESENCIAL motivos de consulta ocultos, que a veces resultan más relevantes en la salud del paciente, sino diferentes a los que manifestaron inicialmente en TRIAXE... y eso depende exclusivamente del Ojo CLínico.6. Cada vez es más frecuente en el mundo privado, el utilizar aplicaciones de TRIAGE con inteligencia artificial, para mejorar su sensibilidad, especificidad al priorizar las consultas... y finalizar el triaje con una VídeoCOnsulta (como ahora ofrece también MOVISTAR), en una respuesta a la INMEDIATEZ como valor primordial de nuestra sociedad occidental...Celebro que ahora se haga a nivel de Sanidad Pública, aliviando duplicidad de consultas telefónicas/presencial... Incorporar y optimizar todas estas nuevas estrategias para brindar un servicio de Calidad y Seguirdad Clínica... sin perder CALIDEZ, será siempre bien venido!Saludos cordiales y un placer saber de vuestros esfuerzos y logros.

Mª Del Carmen 29-12-20

Buenísimo....muy currado....medicina familiar, comunitaria y telefónica....¡¡¡no me extraña que haya merecido el premio del Mº !! :-)))

Jose Antonio 29-12-20

Quiero creer que es una inocentada. Muy bien escrita. Pero inocentada....

Juan Manuel 28-12-20

..y como creo que es una inocentada .. feliz ..y mejor año 2021¡¡

Juan Manuel 28-12-20

Lamentable... es la reflexión que se me antoja al leer este artículo .Lo puedo entender en el momento mas álgido de la pandemia , cuando estábamos todos aturdidos y desorientados ,sin saber cómo afrontar la situación ..., pero ¿¿es ésto , lo que aquí se lee, un planteamiento a largo plazo para nuestra especialidad ?? crear un bunker para nuestra protección . y para acabar con la medicina de familia.. la demanda ,en consulta , la utilización inadecuada es algo con lo que mal que nos pese deberemos convivir , como ocurre en otros sectores dentro de la sociedad de consumo en que nos movemos y no se puede cambiar la realidad "cerrando la puerta"

Carmelo Jorge 28-12-20

Gracias por compartir su experiencia, que me parece muy interesante. El pedir cita telefonica de forma obligatoria inicialmente deberia implantarse en todos los Centros de Salud y Comunidades. Ello sin duda mejoraría la atención a nuestros usuarios y evitaría el uso compulsivo ( y abusivo) de la presencialidad .

Juan 28-12-20

Con esta dinámica de trabajo, me temo que se acaba con la personalización d ella asistencia en gran medida, lo que es uno d ellos valores fundamentales de nuestra especialidad, cuando el paciente enferma depende de que le verá un médico u otro, pero no su médico de familia. Creo que debemos trabajar para conseguir fórmulas que sin renunciar a la seguridad tampoco haya que sacrificar la atención personalizada. Un saludo

Francisco Jose 28-12-20

Hecho en falta las especificaciones tecnicas de los vehículos para traslado a domicilio.